¿Sabes qué es el black friday?¿Piensas aprovechar las ofertas para adelantar las compras navideñas? Seas un cazador de gangas o un novato en el viernes negro, para aprovechar esta batería de ofertas en Estados Unidos hay algunas cosas que debes tener en cuenta antes de lanzarte a comprar. ¿Seguro que es un buen precio ese que te ofrecen?
El black friday es una jornada de descuentos, implementada en Estados Unidos. Es una tradición tan estadounidense que va unida a una de sus fiestas nacionales: se celebra el cuarto viernes de noviembre, justo después de Acción de Gracias. En resumen: son unas rebajas, pero antes de Navidad.
Las precauciones básicas que debes tomar son las mismas que en cualquier periodo de rebajas: evita las compras compulsivas y analiza si la oferta vale la pena. Ojo: no vas a encontrar gangas en todas partes. En lugar de descuentos generales, en muchos comercios (tradicionales o por Internet) optan por usar artículos gancho con descuentos muy elevados, para atraer compradores. También tiran de ofertas temporales, que solo duran dos o tres horas o hasta que se acaban las unidades en promoción.
¿’Black friday’ o ‘black fraude’?
Las tiendas quieren llamar tu atención. Quieren deslumbrarte con ofertas. ¿Son todas realmente una oferta? No. Hay que estar atento a la letra pequeña.
Precios que mutan. Para empezar, las tiendas publicitan productos con los precios de promoción junto a los antiguos (ese que normalmente ponen al lado tachado), pero nadie te puede garantizar que aún así, sea una buena oferta. Quizá el precio que ponen como referencia tachado es el precio original del artículo, pero resulta que ya quedó desfasado hace meses. O quizá hay otra tienda que aplica mejores descuentos.
Ofertas incompatibles.
Otra cosa ante la que debes estar vigilante es si dos ofertas son compatibles entre sí. Por ejemplo: imagina que una empresa vende películas en DVD con una promoción 2x1 (dos artículos al precio de uno). Al mismo tiempo, pone todos los DVD en black friday a 9,99 dólares. Es posible que no puedas elegir ambas ofertas a la vez. Y quizá, si vas a comprar dos, te sigue interesando más el 2x1. Haz cuentas y no te dejes deslumbrar. Lo mismo ocurre con los cupones y los códigos de descuento: debes asegurarte de si son compatibles o no con otras ofertas como los gastos de envío gratis.
Artículos gancho pero muy escasos.
Muchas ofertas son solo para “unidades limitadas”. Las tiendas usan reclamos para atraerte a su web o su comercio. Pero cuando llegas, suele estar ya agotado. Ya que está allí, ¿vale la pena que compres otra cosa? No te dejes llevar y asegúrate de que esa compra alternativa no es solo un impulso. Quizá sea mejor que te esperes a las rebajas navideñas o que busques en la competencia. Piensa con calma antes de sacar la tarjeta de crédito.
Cheques-regalo en lugar de descuentos.
Recuerda que no es lo mismo un descuento directo en el precio de venta que un cheque-regalo o un descuento futuro. Hay tiendas que aseguran descontar 50 dólares en ciertos artículos, pero en realidad obligan al comprador a pagar el precio completo del producto y les entregan un cheque o tarjeta por esa cantidad, que solo se puede usar en esa misma tienda, en otra compra y pasado cierto tiempo. ¿Aún así compensa? Depende de si es una tienda en la que te va a interesar gastar dinero en el futuro.
Cuidado con los cargos extra.
Especialmente si compras por Internet, asegúrate de los gastos extra que tendrá tu pedido. Por ejemplo, los gastos de envío o si hay recargos por pago con tarjeta. Si son muy elevados, quizá te arruinen el ahorro.
El mejor escudo contra los timos.
En general, ante las posibles trampas hay un arma que suele ser infalible: busca y compara. Internet permite saber cuánto valen los productos en varias tiendas sin moverte de casa. Lo ideal es que unos días antes de lanzarte por las ofertas, hagas una lista de los objetos que te interesan y compruebes sus precios. Así el viernes sabrás si de verdad te ahorras dinero. Además, antes de comprar, compara varias webs. Y recuerda que tus derechos no cambian: si no quedas satisfecho, debes poder devolver la compra.
¿Qué tipo de ofertas hay?
Cada tienda ha optado por formatos distintos. Algunas tiendas harán descuentos generales (el 10% en todos los artículos, por ejemplo). Otras se decantan por productos gancho, de los que solo tienen unas pocas unidades pero con rebajas de hasta el 50%. Las páginas web usan muchas veces ventas flash: promociones que están activas solo durante una hora o incluso menos, para que estés pegado al ordenador todo el día. Y unos pocos comercios limitan los descuentos a clientes fieles, a los que envían invitaciones especiales por email. Por último, están las webs de cupones y descuentos: proporcionan códigos que se pueden usar para las compras en muchas marcas distintas, tanto de productos como de servicios.